En el marco de la celebración del Día de los Derechos Humanos, defensores de los derechos humanos se reunieron el pasado 6 de diciembre en el Museo Memoria y Tolerancia de la Ciudad de México para llevar a cabo un conversatorio participativo con el público sobre el futuro de los derechos humanos en México.
A invitación de la ONU-DH, el CINU y el Centro Educativo Truper del Museo Memoria y Tolerancia, los defensores de los derechos humanos debatieron de su experiencias y expectativas en cuanto a las graves violaciones de derechos humanos, la defensa de los derechos culturales y económicos, de los pueblos indígenas, el estado de derecho, la democracia y la impunidad.
El conversatorio es uno de los 14 eventos del mundo destacados por la Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos (ONU-DH) para el 70 aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos. Georgette Gagnon, Directora de operaciones de terreno de ONU-DH, subrayó que este aniversario tiene como propósito de hacer “brillar a los que defienden los derechos humanos”.
Más de 50 años luchando contra la criminalización de los defensores
José Reveles, periodista que trabaja desde 50 años documentando violaciones de los derechos humanos, aseveró que, a 50 años de la matanza de Tlatelolco, México lleva también un medio siglo de desaparecidos, de “criminalización de la expresión política y del activismo social”, “de aquellos que fueron perseguidos por sus ideas”.
Abel Barrera, que dirige el Centro Tlachinollan en la Montaña Guerrero recordó que el origen de la violencia radica en la Guerra sucia en los años 1960 y llamó a acabar con “el patrón de impunidad” que predomina desde tantas décadas.
La abogada Estela Ángeles Mondraón contó su experiencia como asesora de comunidades Tarahumaras en la defensa del territorio contra megaproyectos. A pesar de los hostigamientos, amenazas y asesinatos que han sufrido, subrayó Ángeles lograron ganar 17 juicios apoyándose en los convenios internacionales sobre el derecho a la tierra.
Ximena Antillón, que brinda ayuda psicosocial a las víctimas con la organización Fundar, expresó que la vulneración de la población en México y destacó que si no se transforma en solidaridad, puede resultar en una demanda de militarización, de violencia. Por eso, señaló la importancia de “convertir la rabia en un motor para la justicia, para que no nos destruya”, y la necesidad de la organización.
“Si no nos unimos, sociedad civil y víctimas, difícil vamos a obligar al estado a que haga su chamba”, aseveró Grace Fernández, defensora de Torreón.
“Quiero heredar un mundo mejor que lo que heredé”, dijo el defensor Alberto Xicoténcatl Carrasco, de Coahuila.
Con información de ONU Noticias México