Los manglares son ecosistemas de gran riqueza natural que juegan un papel clave para enfrentar los efectos del cambio climático. Reducen el impacto de las inundaciones costeras y son el soporte de una biodiversidad abundante (cangrejos, moluscos, peces, aves, etc.) que protege y abastece a las comunidades locales. Sin embargo, los manglares sufren un deterioro debido a la piscicultura -técnica para dirigir y fomentar la reproducción y cría de peces y mariscos- la urbanización costera, la contaminación y las catástrofes naturales, como tormentas tropicales u otras. En el transcurso de los últimos veinte años más de 35% de los manglares han desaparecido, y en algunas zonas la pérdida supera 70%.
Tal es el caso de San Crisanto, una comunidad pesquera formada por 150 familias de origen maya, ubicada a lo largo de la costa norte del estado de Yucatán. Lamentablemente, ante el aumento de la crisis climática, han quedado expuestos a los desastres naturales. En 2002 el huracán Isidoro destruyó casi 99% de los manglares de la zona; la falta de este ecosistema provocó graves inundaciones y paralizó la actividad económica local.
En el momento en que un huracán atraviesa la zona protegida se activará automáticamente una indemnización de hasta 100,000 dólares
No obstante, las tareas de protección y restauración de los manglares de San Crisanto han beneficiado en gran medida a sus ecosistemas. El proyecto Manglares San Crisanto ha logrado capturar aproximadamente 47,908 toneladas de dióxido de carbono, de acuerdo con el último reporte de 2022; a la par de impulsar un programa comunitario de desarrollo sostenible y la creación de nuevas fuentes de ingresos.
Por ello, y con el objetivo de reforzar la resiliencia de este ecosistema y de las comunidades que dependen de él, AXA Climate, AXA México y ClimateSeed han creado un seguro paramétrico que responde a las necesidades de este proyecto. En el momento en que un huracán atraviesa la zona protegida, activa automáticamente una indemnización de hasta 100,000 dólares; importe que varía según la intensidad del viento y la proximidad al centro de la zona protegida.
El titular de la póliza, en este caso, la comunidad de San Crisanto recibirá directamente la compensación para financiar los trabajos de reparación ocasionados por el huracán. Esto permitirá la regeneración de un ecosistema próspero y, al mismo tiempo, garantizará la sostenibilidad de los créditos de carbono asociados.
“La colaboración interempresarial entre AXA Climate, AXA México y ClimateSeed representa un gran ejemplo de sinergia”, afirma Antoine Denoix, CEO de AXA Climate. “Con esta cobertura de seguro paramétrico que gira en torno a la restauración de los manglares, estamos dando un paso innovador para servir a las comunidades locales cuya supervivencia está intrínsecamente ligada a estos bosques”.
“Las coberturas paramétricas han sido muy útiles en México para brindar recursos y hacer frente a catástrofes naturales. Durante los huracanes Otis y Lidia, los pequeños negocios con la cobertura Ayuda Express Huracán recibieron entre $7,500 y $10,000 pesos en un plazo de 72 horas, y más de 700 agricultores fueron indemnizados por los daños sufridos por el paso del huracán Agatha en 2022. Estos ejemplos demuestran la rapidez con la que estos seguros responden a las necesidades de los clientes”, señala Daniel Bandle, CEO de AXA México.
En palabras de Sébastien Nunes, director ejecutivo de ClimateSeed, “desde 2020, ClimateSeed ha sido socio de la Fundación San Crisanto, a la cual ha brindado su apoyo a través de la financiación necesaria para el proyecto Manglares San Crisanto’ Gracias a la colaboración conjunta con AXA Climate y AXA México, hoy celebramos una nueva etapa en la alianza que permitirá a la Fundación superar aún más los obstáculos financieros y continuar con su compromiso con la conservación y restauración de los manglares”.
*Comunicado de prensa