La aseguradora Zurich como experta en identificación y gestión de riesgos, en asociación con la empresa tecnológica Embedor, trabajan en un proyecto para probar la eficacia de un revolucionario sistema basado en el Internet de las Cosas (IOT) que evalúa de forma inmediata el daño estructural que ha sufrido un edificio tras un sismo.
Este sistema, que permite medir el impacto de un sismo y sus secuelas, elabora un reporte inmediato, lo que facilita la continuidad de las actividades cotidianas y de negocios. Consta de sensores, que no requieren cables o conexión de red debido a que los dispositivos tienen acceso propio a internet por su conexión GSM, los cuales son colocados en la estructura de un edificio y permiten conocer cuál es la condición del inmueble, una vez que ha ocurrido un temblor.
Zurich continúa mejorando la tecnología ante sismos
La tecnología conocida como Monitoreo de Salud Estructural (SHM, por sus siglas en inglés) permite que los sensores instalados en diferentes partes del edificio se comuniquen entre sí, para comparar las lecturas, a través de Edge Computing, y puedan ser analizados por un software que arroja resultados en el momento en el que ocurrió el sismo.
Los datos que genera el monitoreo se comparan con un modelo computarizado de la estructura del edificio para calcular el impacto o daños que ha provocado la actividad sísmica.
Hay tres elementos fundamentales para la operación de la tecnología SHM:
- Los sensores que miden el desplazamiento en todas las direcciones que pueda haber entre cada sección de la estructura y aportan información confiable y oportuna.
- El modelo computarizado de la estructura que considera toda la información sobre el método de construcción, materiales empleados, el tipo de suelo en el que se asienta, variables ambientales, antigüedad y dimensiones.
- Los parámetros que definen qué tanto desplazamiento es aceptable para la integridad del edificio.
El modelo también evalúa cuál es la clase de movimiento que se considera normal tomando como ejemplo las vibraciones que causa, por ejemplo, el paso de un tren subterráneo, una autopista cercana o el tránsito de personas dentro del edificio.
En caso de actividad sísmica, la solución SHM permitiría conocer el impacto del evento sobre la estructura del edificio y mostraría en pocos minutos la ubicación, la extensión y tipo de afectaciones que sufrió, a diferencia de lo que sucede actualmente en que un especialista debe entrar al edificio para hacer un dictamen de su integridad mediante intervenciones manuales en la estructura, lo que representa un riesgo en el caso de sismos de gran magnitud.
También te puede interesar: Zurich confirma su compromiso con el talento mexicano
De esta manera, el cliente podrá destinar los recursos y atención necesaria en los trabajos de reparación y mantenimiento específicos a las áreas afectadas con lo que se acortará el periodo necesario para que el edificio vuelva a su operación plena.
Se espera que esta solución aporte un mayor grado de confianza a la buena condición y durabilidad del edificio.
Eventualmente, esta solución significará una menor indemnización por pérdidas consecuenciales para la industria de seguros, ya que la interrupción de operaciones podría reducirse de forma significativa.
De obtenerse un resultado positivo en el desempeño de la solución SHM en la Ciudad de México, ésta será de gran utilidad para que clientes de Zurich de cualquier giro y en regiones de alta actividad sísmica, como la Ciudad de México apoyados por el área de ingeniería de riesgos, puedan volver a la normalidad en un periodo razonable de tiempo, pero sobre todo en un entorno seguro.
Este proyecto demuestra el compromiso de Zurich, de la mano de diversos socios, para invertir en avances y soluciones que resulten en mejor servicio a sus clientes y les permitan sentirse más seguros y resilientes ante inevitables eventos como los sismos.
¿Tu organización es socialmente responsable y trabaja a favor de la sostenibilidad?