El ser humano ha estado en constante tránsito desde la antiguedad. Los continentes fueron descubiertos por el desplazamiento de personas en busca de «algo nuevo»; probablemente ya ni siquiera vivas en la casa donde creciste.
Algunas personas se desplazan en busca de trabajo o de nuevas oportunidades económicas, para reunirse con sus familiares o para estudiar. Otros se van para escapar de conflictos, persecuciones, del terrorismo o de violaciones o abusos de los derechos humanos. Algunos lo hacen debido a los efectos adversos del cambio climático, desastres naturales u otros factores ambientales.
En la actualidad, el número de personas que vive en un país distinto del que nacieron es mayor que nunca: 272 millones en 2019, 51 millones más que en 2010, según cifras de las Naciones Unidas. Los migrantes internacionales comprenden hoy un 3,5% de la población mundial, cifra que continúa ascendiendo con respecto al 2,8% de 2000 y al 2,3% de 1980.
¿Qué es un migrante?
Migrante, según la OIM es un «término genérico no definido en el derecho internacional que, por uso común, designa a toda persona que se traslada fuera de su lugar de residencia habitual, ya sea dentro de un país o a través de una frontera internacional, de manera temporal o permanente, y por diversas razones».
Este término comprende una serie de categorías jurídicas bien definidas de personas, como los trabajadores migrantes; las personas cuya forma particular de traslado está jurídicamente definida, como los migrantes objeto de tráfico; así como las personas cuya situación o medio de traslado no estén expresamente definidos en el derecho internacional, como los estudiantes internacionales.
Los migrantes y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)
La Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible reconoce por primera vez la contribución de la migración al desarrollo sostenible. 11 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) contienen metas e indicadores que son pertinentes para la migración o el desplazamiento. El principio básico de la Agenda es «no dejar a nadie atrás» y esto incluye a los migrantes.
La principal referencia a la migración en los ODS se establece en la meta 10.7: Facilitar la migración y la movilidad ordenadas, seguras, regulares y responsables de las personas, incluso mediante la aplicación de políticas migratorias planificadas y bien gestionadas. Otros objetivos tratan también distintos aspectos de la migración tales como la trata de personas, las remesas y la movilidad internacional de estudiantes, entre otros. Cabe añadir que la migración es indirectamente relevante para otros muchos objetivos.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM)
Fue creada en 1951 y es la principal organización intergubernamental en el ámbito de la migración y trabaja en estrecha colaboración con asociados gubernamentales, intergubernamentales y no gubernamentales.
La labor de la OIM consiste en cerciorarse que la migración se gestiona de forma ordenada y humana; promover la cooperación internacional sobre cuestiones migratorias; ayudar a encontrar soluciones prácticas a los problemas migratorios, y ofrecer asistencia humanitaria a los migrantes que lo necesitan, ya se trate de refugiados, de personas desplazadas o desarraigadas.En 2016, la OIM llegó a un acuerdo con las Naciones Unidas para convertirse en una de agencia especializada de la Organización.
Derechos de los migrantes
El Consejo Nacional de los Derechos Humanos de México establece los siguientes derechos de los migrantes:
- Derecho a la Nacionalidad
- Derecho a la libertad de tránsito
- Derecho a la seguridad jurídica y al debido proceso
- Derecho a la asistencia consular
- Derecho a no a la no discriminación
- Derecho a solicitar asilo
- Derecho a solicitar el reconocimiento de la condición de refugiado
- Derecho a la protección de la unidad familiar
- Derecho a la dignidad humana
- Derecho a no ser criminalizado
- Derecho a un alojamiento digno
- Derecho a no ser incomunicado
Con información de la OIM.
¿Tu organización es socialmente responsable y trabaja a favor de la sostenibilidad?