C&A y la Fundación C&A presentaron este martes sus informes de sostenibilidad y reporte anual en materia de sostenibilidad y proyectos sociales en los que explicaron sus avances en “la producción de una moda accesible de manera responsable”, como explicó Kelly Kroguer, CEO de la empresa.
Igualmente la fundación corporativa explicó los resultados de sus alianzas para convertir la industria de la moda en una industria para el bien.
En la introducción, Kroguer explicó los esfuerzos que está haciendo la compañía en transparentar la cadena de suministro para que se conozca cómo se producen sus prendas.
Además explicó cómo cada vez usan algodón “más responsable” siendo C&A el principal comprador de algodón orgánico en el mundo.
“Queremos que nuestros clientes se sientan bien con nuestra ropa y estando tranquilos de que la producción ha sido responsable”, subrayó.
De este modo, Alejandra Sánchez, líder de Sostenibilidad de C&A en México, expuso cómo la empresa se encontraba moviéndose hacia una economía circular y empujando la innovación.
Como principales hitos destacó la producción de 4 millones de prendas bajo la certificación Cradle to Cradle y cómo la empresa consiguió producir los primeros jeans bajo esta certificación.
“La información se tiene que compartir porque como marca no conseguiremos tanto como lo puede hacer la industria al completo”, subrayó al indicar que la manera de producir estas prendas está disponible para todo el sector a través de la iniciativa Fashion for Good.
También hizo hincapié en el uso de algodón responsable a través de algodón orgánico o bajo los estándares de Better Cotton Iniatiative ya que debido a las dificultades de trazabilidad del algodón orgánico, “ésta se convierte en la alternativa más escalable y nos aseguramos que se haya producido bajos las mejores prácticas sociales y medioambientales”. En México, señaló, el 48% del algodón que usa C&A es de origen sostenible.
México logró especial relevancia en este aspecto de la sostenibilidad de la marca a través de BioWash, un proceso que logra un ahorro de hasta 60% del agua que regularmente se utiliza en la elaboración de prendas de mezclilla.
De hecho, después de un piloto que empezó en 2017, en el mes de abril pasado, C&A lanzó su primera colección sustentable denominada Wear The Change.
Una experiencia que, en palabras de Kroge es un reto lleno de aprendizajes. “Aprendimos que explicar el valor del producto sostenible en tienda es difícil; que el entendimiento por parte del gran público todavía es bajo; y que lo sustentable es un plus, pero el cliente primero quiere un producto que le guste”.
Aseguró que seguirán lanzando colecciones sostenibles “para lograr atinar qué tipo de prenda quiere el cliente”.
La labor de la Fundación
Para rendir cuentas sobre la labor de la Fundación C&A, Patricia Barroso y Stephen Birtwistle, gerentes de comunicación y programas respectivamente, expusieron cómo conciben ser una fundación de segundo piso.
“Apostamos por una relación horizontal con nuestros aliados”, explicó Birtwistle quien confesó que hace unos años en un estudio de percepción con los socios de la fundación, “esta aparecía más jerárquica de lo que ellos decían ser”, cuestión que “ha mejorado, pero aún hay aspectos que mejorar”. De hecho, el informe fue presentado el día anterior a los aliados.
“A los que somos donantes nos suele gustar que nuestras donaciones se transforme en cuestiones tangibles, pero lo que hemos aprendido es que las que se fortalecen ofrecen mejores resultados”, destacó por su parte Barroso al apuntar que apoyan a proyectos de refuerzo a sus aliados.
De hecho, el 4% de los proyectos que apoyaron “muestran poca evidencia de progreso en el largo plazo”, mientras que el 77% sí mostraron consecución de resultados.
El reporte anual 2018 de Fundación C&A se basa en cuatro puntos de inflexión que experimentó la organización y cuatro lecciones aprendidas.
Así los cuatro puntos de inflexión fueron:
- Pasar de una relación donante-beneficiario unilateral a una alianza entre iguales.
- La transparencia impulsada por los trabajadores mejora las condiciones laborales.
- Pasar de un movimiento disruptivo a una responsabilidad constructiva de las marcas.
- Escalar la innovación a través de plataformas como Fashion for Good.
En cuanto a las lecciones aprendidas:
- Fortalecer la organización incrementa el impacto
- Para lograr buenos resultados el trayecto debe ser colectivo
- Para cambiar la política, todas las opiniones son bienvenidas, pero debe oírse una sola voz.
- El aprendizaje sin aplicación no es aprendizaje.
Te animamos a consultar el reporte anual de la Fundación C&A y el informe global de sustentabilidad de C&A