El día de ayer el Gobierno de España declaró oficialmente la emergencia climática en el país, con el fin de hacer frente con más contundencia a los graves impactos derivados de la crisis climática.
El Consejo de Ministros fue quien tomó la decisión que lleva a la par el compromiso de adoptar 30 líneas de acción prioritarias, de modo que el ejecutivo de coalición Pedro Sánchez pone el acento una vez más en la lucha de la crisis climática como uno de los ejes principales, y transversales, de su acción política, afirma el portal de Radio Televisión Española.
Hasta el momento otros de los pocos Gobiernos en el mundo que han implementado declaraciones de este tipo son Irlanda, Canadá y Francia.
Crisis climática
El portal de la WWF asegura que en la actualidad los más pobres son los que más sufren al no disponer de los recursos necesarios para prever los duros golpes de la crisis, como son construcciones resistentes, reservas de alimento o dinero para actuar con rapidez una vez el desastre ha pasado. Sin embargo, asegura, que la crisis climática es una amenaza que no distingue entre animales, plantas o humanos, ricos o pobres, es un problema que afecta y compete a todos.
¿Por qué emergencia climática?
Se define como emergencia ya que, señala tanto la magnitud del problema como la urgencia de una solución antes de que los daños sean irreversibles. Se fija como objetivo y único camino posible alcanzar la neutralidad climática en 2050.
Teresa Ribera, vicepresidenta de Transición Ecológica y Reto Demográfico, defendió la declaración de la emergencia climática para «ir mucho más deprisa en la consecución de los objetivos medioambientales y las políticas propuestas por razones de justicia climática entre países, territorios, generaciones y personas, por futuro del país que requiere un proyecto ambiental transversal y por responsabilidad política frente al desafío del cambio climático«.
El Gobierno pondrá en marcha 30 líneas de acción prioritaria, cinco de ellas en los primeros 100 días de Gobierno, y son Ley de Cambio Climático y Transición Energética; Descarbonización; Plan Nacional de Adaptación; Asamblea Ciudadana de Cambio Climático; y Transformación Productiva.
La declaración tiene como objetivo lograr un futuro común, más justo y equitativo, que aproveche las oportunidades de la transición ecológica mediante políticas trasversales, que pongan al ciudadano en el centro, y no se autorizarán nuevas solicitudes de exploración, permisos de investigación o concesiones de explotación de hidrocarburos, ni para actividades de fracking, añade el portal de Diario La Vanguardia.