Moctezuma, durante la presentación de su Informe Anual Integrado 2024, presentó la iniciativa en favor de la vida marina: Reef Balls: reconstruyendo los pilares del mar, un proyecto que consiste en fabricar, instalar y monitorear 500 arrecifes artificiales Reef Balls con el propósito de contribuir a la restauración de los ecosistemas marinos, preservar su biodiversidad y sumar a la gestión sostenible de los océanos.
“En un mundo que enfrenta crecientes desafíos ambientales, proteger nuestros entornos naturales ya no es una opción, sino una responsabilidad compartida. Gobiernos, iniciativa privada y sociedad debemos adoptar un papel activo (y proactivo) en la preservación de los ecosistemas que nos rodean. Y en Moctezuma hemos asumido decididamente ese compromiso”, declaró Maribel Leyte, directora de Sostenibilidad de la empresa.
Las Reef Balls son módulos que están diseñados para imitar la estructura y función de un arrecife natural. Están hechas de concreto no contaminante, con una alcalinidad (pH) similar a la del agua del mar, y se estima que duran hasta 500 años en el lecho marino.
Las 500 Reef Balls, que se fabricaron en diferentes tamaños y pesos, se instalaron a 3 kilómetros de las costas de San Benito en Yucatán
Además de que se convierten en hogar y refugio de diversas especies, como peces, crustáceos y esponjas, las Reef Balls proveen múltiples beneficios, como reducir la presión sobre los arrecifes naturales sobreexplotados, favorecer la restauración del coral, los estuarios y los arrecifes de ostras, proteger las costas y las playas de la erosión y los huracanes, y proveer alimento para las personas que viven en las costas.
“Este proyecto representa una apuesta tangible por el futuro del planeta y el bienestar de las comunidades costeras. Tenemos la certeza de que cada acción cuenta y de que restaurar la vida marina también es construir un mejor México”, afirmó José María Barroso, director general de Moctezuma.
Las 500 Reef Balls, que se fabricaron en diferentes tamaños y pesos, se instalaron a 3 kilómetros de las costas de San Benito en Yucatán, a una profundidad de entre 5.5 y 6 metros.
Estas estructuras, amigables con el medio ambiente, crearán aproximadamente 1,584 m2 de nueva superficie para el desarrollo de la vida marina, permitirán el repoblamiento de la zona con flora y fauna endémica, como corales duros y blandos, esponjas incrustantes y algas de alto valor biológico, y capturarán alrededor de 2,225 kg de dióxido de carbono (CO2) al año, a través de sus corales y algas.
Para garantizar la ejecución cabal de este proyecto, Moctezuma colaboró con Reef Ball México, organización internacional sin fines de lucro, especializada en el diseño y la fabricación de Reef Balls, que ha instalado exitosamente más de 30,000 arrecifes artificiales en los mares del país.
Adicionalmente, la empresa produjo el cortometraje documental Un hogar en el mar, y creó un micrositio dedicado, con el objeto de sensibilizar, inspirar y movilizar a la sociedad sobre la importancia de conservar nuestros océanos.
Esta iniciativa forma parte de la Estrategia de Sostenibilidad de Moctezuma y contribuye a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización de las Naciones Unidas, particularmente al Objetivo 14: Vida submarina y al Objetivo 13: Acción por el clima.
“Cada Reef Ball es una semilla de esperanza. Estamos comprometidos con el futuro azul del planeta y con el bienestar de las generaciones que vienen. Porque donde hay vida, hay posibilidad de construir un mejor mañana”, concluyó Barroso.
*Comunicado de prensa