Este mes de julio, Oaxaca celebra una edición más de la Guelaguetza. Estas fiestas atraerán más de 138,000 visitantes, llenarán sus hoteles en un 83 % y favorecerán la creación de 181,000 puestos de trabajo directos e indirectos, según previsiones del Gobierno estatal. Desfiles, actividades deportivas y culturales llenarán las calles de esta ciudad. Y este año se suma un nuevo atractivo, la iluminación nocturna de uno de sus puntos de encuentro más emblemáticos: el Templo de Santo Domingo de Guzmán. Iberdrola México prosigue así su plan de embellecer con iluminación sostenible y de vanguardia diez edificios monumentales del centro histórico oaxaqueño, declarado Patrimonio de la Humanidad.
Con el Templo de Santo Domingo de Guzmán ya van dos de la lista. El programa arrancó en 2024 con la iluminación de la Catedral Metropolitana de Oaxaca. Y se prevé que, en esta segunda mitad de 2025, se sumen el templo oaxaqueño de San Matías Jalatlaco y la Basílica de Nuestra Señora de la Soledad. Además, este año, el programa dio el salto al estado de Coahuila con la iluminación de la Catedral de Saltillo, y lo que empezó llamándose Oaxaca Brilla, ahora se llama México Brilla.
En el acto de inauguración del nuevo sistema de iluminación para el Templo de Santo Domingo de Guzmán estuvieron representantes de las organizaciones que trabajaron conjuntamente para hacer posible este proyecto financiado por Iberdrola México: el Gobierno del Estado, el municipio de Oaxaca de Juárez, la Arquidiócesis de Oaxaca y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Salomón Jara Cruz, gobernador del estado de Oaxaca, se congratuló por este nuevo avance de México Brilla ya que la iluminación de estos espacios patrimoniales muestra “que la luz bien entendida y bien aplicada es mucho más que una herramienta técnica, es un homenaje a nuestra historia viva y un puente entre el pasado y el futuro”.

Por su parte, Raymundo Chagoya Villanueva, presidente municipal de Oaxaca de Juárez, consideró que la iluminación del Templo de Santo Domingo de Guzmán constata la importancia de un proyecto que dirige a la ciudad “a un modelo más comprometido con el medio ambiente”, a la vez que permite a la urbe “proyectarse al mundo” y que los viandantes “perciban mayor seguridad en las calles”.
Se han instalado 46 luminarias que lograrán una reducción de hasta el 55% del consumo energético respecto a la iluminación anterior
En su turno, Katya Somohano, CEO de Iberdrola México, recordó la importancia del estado de Oaxaca, donde la empresa inició su apuesta por las energías renovables en México. “No podemos explicar la presencia de nuestra empresa en el país sin pensar en Oaxaca”, reconoció para posteriormente destacar que “entre nuestros colaboradores y colaboradoras tenemos personas que pertenecen a las comunidades zapotecas, mixtecas y mixes, a los que este año rendiremos un homenaje como parte de nuestra comunidad de trabajo”.
En este sentido, y en declaraciones a Valor Compartido, Paola Martínez Castro, directora de Comunicación y Responsabilidad Social de Iberdrola México, subrayó que la empresa ha emprendido proyectos sociales en Oaxaca como Luces de Esperanza, Impulso STEM o Brigadas Urológicas, entre otros. “Yo diría que Oaxaca es el estado donde más proyectos sociales tenemos en el país”, concluyó.
Además de correr con la financiación de la nueva iluminación (1 millón de dólares para todo el programa en Oaxaca), Iberdrola México cuenta con un aliado técnico para desarrollar México Brilla con el que ha trabajado a nivel global en el programa de iluminación patrimonial de Grupo Iberdrola. La empresa Varona es reconocida por su trabajo de iluminación en monumentos alrededor del mundo y muchos de ellos, como las Pirámides de Guiza, la Catedral de Burgos o la de Santiago de Compostela, son Patrimonio de la Humanidad.
Durante varias semanas, operarios de Varona, bajo la supervisión de técnicos del INAH, se ocuparon de instalar 46 luminarias LED para el Templo de Santo Domingo de Guzmán. Con esta nueva instalación se logra reducir el consumo energético en un 55 % respecto al sistema anterior. Además del ahorro energético, el sistema amplía su vida útil en hasta 100,000 horas y las ópticas de los focos logran dar más precisión a la luz, resaltando los elementos más relevantes de la arquitectura de este monumento histórico y reduciendo a la vez la contaminación lumínica y la huella de carbono.