La iniciativa Youth Challenge arrancó el 2 de diciembre, en el marco de la alianza Generación Sin Límites en más de 40 países, entre ellos por primera vez en México, en conjunto con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, (PNUD).
Con el objetivo de que las y los adolescentes y jóvenes mexicanos puedan desarrollar y diseñar soluciones creativas e innovadoras que mejoren su educación, empleabilidad y compromiso cívico, el Youth Challenge (¿Qué es el Youth Challenge?) busca empoderar a las y los adolescentes para que sean agentes de cambio social en sus comunidades y sus propias vidas.
El reto busca fortalecer sus habilidades de emprendimiento y de trabajo, además de apoyarlos en la incubación de sus soluciones a problemas sociales diseñadas por jóvenes para jóvenes.
“Al llegar a la adolescencia, los niños y niñas se enfrentan a muchos retos, como adultos debemos apoyarlos para dar solución a los problemas que enfrentan y permitirles así que desarrollen al máximo todas sus capacidades. En este sentido el Gobierno y el sector privado tienen un papel muy importante que jugar “, destacó Christian Skoog, representante de Unicef en México.
En México, los jóvenes entre 15 y 29 años representan una cuarta parte de la fuerza laboral del país, es decir 30.7 millones de personas (INEGI, 2017). Sin embargo, siguen siendo el segmento de la población más afectado por el desempleo, la informalidad y la precariedad de condiciones laborales.
Asimismo, en el país, 3 de cada 10 adolescentes de 15 a 17 años se encuentran fuera de la escuela y sólo 4 de cada 10 adolescentes en pobreza extrema continúan estudiando después de la secundaria.
De los más de 600 adolescentes y jovenes, en los 200 grupos inscritos, 50 equipos pasarán a un pre-bootcamp a principios de diciembre. De éstos pasarán 30 al bootcamp intensivo donde finalmente se seleccionarán las cinco ideas más prometedoras y se les otorgará un fondo semilla de USD $1,000 a cada equipo para su financiación, además contarán con asesoramiento y mentoría para apoyar la implementación de sus proyectos, según información de Unicef México.
En junio de 2020, los dos equipos finalistas participarán en el proceso de evaluación global. Estos proyectos recibirán hasta USD $20,000, junto con un programa de incubación global para apoyar su escalabilidad.
Para esta primera edición en la Ciudad de México y área metropolitana, se contó con el apoyo de la Secretaría de Ciencia, Tecnología, Educación e Innovación (SECTEI) de la Ciudad de México, el Instituto Mexicano de la Juventud (IMJUVE), y el Sistema de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), además del apoyo de Nacional Monte de Piedad y otros actores del sector privado y educativo.